Te comienzo a escribir a las 0:44 de esta noche del 26 de agosto, entre el viernes y el sábado, con el deseo de que estés bien, que te lo estés pasando estupendamente bien y que estés disfrutando mucho. Ojalá que estés riendo y sonriendo, y haya personas que puedan contemplar tu bellísima sonrisa sincera. Que con quienes estés, que con quienes estés compartiendo estas horas, os sintáis muy bien y si, entre esas personas, hay alguien especial para ti y tú eres especial para esa persona, pues mucho mejor, que sean buenos momentos para afianzar el encuentro.
Que tengas muy feliz noche y muy espléndido fin de semana, fascinante María Tengoku, que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, bendita seas siempre.