Una nueva noche de viernes, pero ya no son como el año pasado, en que podía desearte todo lo mejor, que las disfrutaras mucho, que lo pasaras muy bien.
Echo de menos tus abrazos, echo de menos tu compañía, echo de menos poder saber de ti, echo de menos poder comunicarme contigo, echo de menos poderme ofrecer a ti. Lo echo todo de menos.
Sé que entre 2021 y 2022 ya no me abrazaste como antes, ya no sentías la necesidad que sentiste en 2007 y 2008. Y tu cuerpo, desde luego, tampoco tiene que ver entre una y otra época. Qué complicado todo.
Espero, confío y deseo que tú al menos estés disfrutando, María, que lo estés pasando muy bien. Ojalá que así sea y tengas muy feliz fin de semana, bendita seas siempre.