Que estos tres días anteriores no te he escrito, no significa que me olvide de ti, María Tengoku; sencillamente, que las adversidades o las tareas varias de la vida no me han permitido centrarme en dedicarte explícitamente unos minutos escribiéndote.
Una mujer que me guste, una canción romántica en el supermercado, los recuerdos que aparecen, una y otra vez en mi mente, las fotos, los algoritmos... Todo me lleva a ti.
No compartes nada desde el 28 de julio en tu red social clásica. Espero que sea porque estás ocupada para bien, que estás disfrutando con lo que estás haciendo, por que te va muy bien y no tienes tiempo para compartirlo. Que así sea.
Y por muchas canciones que haya, la que es para ti es esta:
