domingo, 6 de agosto de 2023

Y si no me has bloqueado...


Es curioso cómo todo mi ser reniega de la idea de apartarte de mi vida, aunque tú no quieras comunicarte conmigo... Y ahí surgió esa anécdota de la que me di cuenta ayer; si bien yo mantengo esa muy eventual comunicación contigo, tú sigues sin decirme o escribirme que no me vuelva a referir a ti, y tampoco me has bloqueado de forma alguna, por lo cual te di ayer las gracias.

¿Eres demasiado buena? ¿Eres demasiado perezosa, incluso para hacer algo tan sencillo como bloquearme? ¿Aceptas que, en verdad, yo no te he hecho nunca mal, aunque sí haya tenido fallos y errores múltiples contigo? No lo sé, probablemente, nunca tenga una respuesta clara; quizá sólo sea que sientes que no te convengo y por eso me tienes apartado.

Yo, por el contrario, sigo ansiando poder contemplar tu belleza, aunque sea sólo desde la distancia o virtualmente. Porque estuve en tus manos, porque estuviste en mis brazos. No podré volver a tener, seguramente, pero sí te tuve en el pasado, aunque para ti solo fuera un capricho. Muchas gracias por encapricharte de mí, por ser la única que me hizo sentir especial para una mujer.

Que tengas una estupenda semana nueva, que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre.

Dios te bendiga

A pesar de mi confianza en Dios, a pesar de mis oraciones, de mis esfuerzos, no pudo ser. Allí estabas tú. Y ya estaba avisado de que estuvi...