sábado, 30 de septiembre de 2023

Que goces de tu noche de sábado...

Encuentres donde te encuentres, estés con quien estés, estés haciendo lo que estés haciendo, que disfrutes de tu noche de sábado, María Tengoku. Si puedes estar con alguien para quien tú seas especial y esa persona sea especial para ti, mucho mejor, que celebréis el poder estar juntos aún con más ganas.

Te quiero, te querré toda mi vida, aunque no pueda estar cerca de ti, aunque no quieres comunicarte conmigo; eres única, eres especial, eres fascinante. Que tengas muy feliz domingo, María Tengoku, muy feliz día del Señor para todos los tuyos y para ti.

viernes, 29 de septiembre de 2023

Te deseo lo que yo nunca tendré...

Te deseo lo que yo nunca tendré, María Tengoku, que haya una persona que sea especial para ti y que tú seas especial para esa persona. Que esta noche de viernes estés con esa persona y, si aún no está contigo, que lo esté pronto, que puedas vivir la vida más plenamente, más provechosamente, más plácidamente, más divertidamente, más felizmente.

Muchas gracias, por ser la única mujer, muchacha o chica, que se molestó en hacerme sentir especial a mí para otra persona; creo que tus experiencias anteriores sí te hicieron sentir especial a ti, aunque, por desgracia, no pudieron perdurar. Que la próxima vez ya sí tengas esa plena fortuna, que la próxima vez, ya sí sea para toda la vida. Te deseo lo que yo nunca tendré, María Tengoku, que seas muy feliz con la persona con quien quieras compartir tu vida. Yo te seguiré queriendo, siendo consciente de que no soy persona. Feliz fin de semana tengas.

jueves, 28 de septiembre de 2023

Sentarte a mi lado, sentirte a mi lado...

"Sentarte a mi lado, sentirte a mi lado"... Se me quedaron en el pensamiento estas dos expresiones de ayer, tan parecidas gramaticalmente y tan potentes, emocionalmente hablando.

En esta segunda etapa he entendido cómo te gustan tus parejas: supervivientes, personas capaces de seguir y salir adelante, de improvisar, de luchar aunque todo esté en contra, que tienen habilidades y destrezas para sobrellevar todo tipo de situación y, claro está, salvar también a quienes tienen alrededor.

Comprendo que yo no soy así, yo me quedo en mero animador-servidor, no llego a tantísimo. Así, cuando pienso que te encaprichaste conmigo en el pasado y que, prácticamente, soy igual en el presente, sólo puedo resolverlo con que tú te equivocaste, pensaste que yo era de otra manera o que podía ser de otra manera. Y que ya te desengañaste de mí, porque tú, al igual que yo, seguimos siendo prácticamente iguales que entonces (bueno, yo más viejo y acabado; tú, aún más hermosa y fascinante que antes).

Que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre. 

miércoles, 27 de septiembre de 2023

Día 27.

 

Los días 27 del mes siguen siendo días 27. Siguen siendo días de recordar unos momentos únicos en mi vida; de yo estar supliendo a quien debería estar realmente allí; de presentarte tú, María Tengoku, que no tenías por qué estar allí y decidir sentarte a mi lado; de sentirte a mi lado, de sentirte la frialdad en tus manos, de sentir tu ruido en la silla, de darte un beso de paz... Y de ese profundo dolor al marcharte de mi lado.

Día 27, día de recordar a la única mujer, o muchacha, en aquella época, que se ha sentido a gusto de estar a mi lado; de ponerse a mi lado con toda libertad, porque quería hacerlo. De recordar a alguien tan única en mi vida.

15 años y 5 meses, y sigo contando. Que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre.

lunes, 25 de septiembre de 2023

Mi corazón ya no late como antes...


Mi corazón ya no late como antes, por la emoción de poder sentirte. Ayer, caminaba hacia esa posibilidad de verte y, mientras más me acercaba, notaba que mi corazón seguía tranquilo. Meses atrás, años atrás, era una inmensa emoción la de pensar sólo en poder verte, aunque fuera de lejos. Ahora, sé que no sólo no me hablarías, sino que probablemente, hasta volverías la cara si me vieras cerca. Así se han vuelto las cosas; es lógico que mi corazón no se emocione, si sé que no me espera nada.

A pesar de ello, a pesar de tanto sufrimiento y tanta pena, tanta amargura y tanta tristeza, quiero saber si puedo saber algo de ti, aunque sea verte de lejos, con 200 personas de por medio, pero poder verte a una persona única en mi vida y a la que le sigo deseando lo mejor, aunque ya no quieras verme, ni saber de mí.

Que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre, que te vaya muy bien en esta última semana de septiembre.

domingo, 24 de septiembre de 2023

Y no estabas tú...

Este domingo fui, por primera vez en este curso, en este mes de septiembre. Estaba la que comparte tu nombre y hasta tu primer apellido (aunque también como nombre), estaba la que es Mª. José... Y no estabas tú. Verdaderamente, no sé si estás por aquí o permaneces aún en tu lugar de veraneo, o si incluso hay algún motivo que te impide venir. O sencillamente, ya no quieres estar en el templo. Verdaderamente, no lo sé, sólo que hoy no estabas tú.

¿Volveré alguna vez a verte, aunque sea de lejos, con 200 personas de por medio? De momento, habrá que esperar otra semana más, no puedo hacer ninguna otra cosa.

Que tengas una estupenda semana nueva, María Tengoku, que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, bendita seas siempre. 

sábado, 23 de septiembre de 2023

Que goces tu sábado noche...

Hoy he vuelto a sentir la tranquilidad temporal que me da saber que has compartido algo en tus redes sociales, aunque no pueda verlo. Esa tranquilidad de que haces cosas normales, que tienes tiempo y dedicación para hacerla, que quieres hacerla y puedes acceder a ello. Tranquilidad.

Espero que tus perfectos ojos y tú gocéis mucho de esta noche de sábado, que lo pases muy bien, que estés muy a gusto y feliz con quien estés, y si hay alguien que te resulte especial y tú seas especial para esa persona, infinitamente mejor.

Feliz noche de sábado tengas, María Tengoku, y un fabuloso domingo después. Bendita seas siempre. El domingo pasado no pude tratar de ir a verte por la enfermedad; mañana sí que intentaré verte, aunque no lo consiga.

viernes, 22 de septiembre de 2023

Feliz noche de viernes...


Allá donde encuentres, allá donde estés, estés con quien estés, que estés pasando una estupenda noche de viernes, María Tengoku, que la estés disfrutando mucho. Que tengas muy feliz fin de semana.

sábado, 16 de septiembre de 2023

Que estés gozando de tu sábado noche...

 

Ojalá que estés gozando de tu sábado noche, María Tengoku, que tu belleza esté resplandeciente; tu gran sonrisa, luminosa; tus profundos ojos, brillantes; todo tu ser, fascinante y arrebatador, como así es, como yo lo conocí y como estoy seguro de que aún es.

Aunque no quieras saber nada de mí, aunque no quieras responderme ya a nada, yo te deseo todo lo mejor, deseo verte así de fuerte y de hermosa, que te sientas muy bien, que estés feliz o que, al menos, tengas algunos pequeños grandes momentos de gran felicidad y de disfrute. Yo sé que sigues siendo así, pero, al menos, a mí, no quieres mostrármelo. Que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre y feliz día del Señor tengas.

Probaré a intentar verte mañana, de lejos, con 200 personas en medio. ¿Estarás? Mañana lo sabré.

viernes, 15 de septiembre de 2023

Que disfrutes de tu viernes noche...

 

Que estés disfrutando de tu viernes noche, que lo estés pasando muy bien, que te encuentres muy bien acompañada y te sientas muy a gusto. Si estás acompañada de alguien muy especial para ti, pues que tú también seas muy especial para esa persona.

Echo de menos no poder escribírtelo directamente, pero es lo que hay, así es la vida, lo entiendo. Ojalá que estés pasando una estupenda noche de viernes, María Tengoku, bendita seas siempre.

jueves, 14 de septiembre de 2023

Ambos hemos aprendido la lección...


Gracias por encapricharte de mí, María Tengoku, entre aquella época del 2007 y el primer semestre de 2008; gracias por escribirme aquel correo electrónico el 15 de enero de 2021; gracias por haberme dejado acompañarte, por haberme permitido estar contigo; gracias por todo ello.

Ya tengo claro que los dos hemos aprendido la lección: Yo no valgo nada, soy muy poca cosa para cualquier mujer, incluida tú, no tengo nada atractivo, ni interesante, ni por lo que merezca la pena estar conmigo.

Por eso vuelvo a darte las gracias por cada instante que pasaste conmigo, por cada letra que me escribiste, por cada vez que te acordaras de mí, aunque fuera un solo momento al día. Muchas gracias, María Tengoku, eres lo más valioso que han hecho por mí, porque tú no eras familiar mío, ni nunca me debiste nada, ni tan siquiera tuviste por qué molestarte por mí. Y sin embargo, por la belleza y la hermosura de tu ser, lo hiciste. Gracias, infinitas gracias por tan alucinante pasado para mi vida.

Que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre.

Aquella última hora...

Hoy hace un año de aquella última vez en que pasaste una hora (o algo más, conmigo). En verdad que ya estabas distinta, desde principios de septiembre, como más distante, más fría, más indiferente, más reacia hacia mí. Pienso que, lo que sea que te hizo cambiar de postura hacia mí, pasó en verano, aunque quedó claro que la determinación definitiva la tomaste en Navidad.

Yo, sin embargo, estaba tan contento de poder estar cerca de ti, de estarte acompañando, de poder verte y sentirte tan cerca mientras nos tomábamos aquella granizada, que no me daba cuenta de la realidad.

Nunca te he traído suerte, nunca te he aportado algo verdaderamente importante, nunca te he sido verdaderamente útil en la vida; soy tan poca cosa... Te echo de menos, te echo tantísimo de menos.

Que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre.

martes, 12 de septiembre de 2023

Que haya ido muy bien tu santo...

Ya son las 21:30 h., cuando comienzo a escribir este texto, y sé que voy a cumplir mi promesa de no molestarte en un día como el de hoy, aunque eso sí, aquí pongo por escrito que espero que te hayas sentido muy feliz. Pienso que ha sido así por la foto que has compartido; si la quisiste compartir es porque te sentías a gusto, contenta y, como escribo, espero que feliz.

Vuelvo a ver la foto en tu historia de Telegram y ni tan siquiera marco "me encanta", para no molestarte, para no darte la lata; sigo sin reconocer el lugar, no sé dónde es. Lo único que deseo es que los tuyos y tú hayáis tenido un día muy bueno y ojalá que, para ti, haya sido también muy especial.

Que te vaya muy bien, hermosa y fascinante María, que en el futuro siga habiendo pequeños grandes momentos muy especiales y que te puedas sentir muy feliz cada día.

Y una persona en el medio...


He visto la foto con más tranquilidad y calma, tras los primeros instantes y, entre dos familiares directos tuyos, hay en el centro una persona que, en principio, no reconozco (está de lado, lleva gafas de sol y yo soy un pésimo fisonomista). Como ya pasara en septiembre de 2008, quizá sea el primer atisbo fotográfico de que hay una persona especial en tu vida y que, muy probablemente, sea la persona definitivamente especial para ti. Estaré atento a futuras imágenes, deseándote que sea lo mejor para ti.

Aún, y a pesar de todo, me llega tu magia...


En este día de tu santo, apenas he compartido la entrada anterior, me llega una notificación al móvil de que has publicado una foto en tu historia de Telegram... La he visto, pero no he marcado "me encanta", por no agobiarte, no quiero parecer que estoy tan encima de ti, aunque ya me gustaría, claro...

Aún, y a pesar de todo, me sigue llegando tu magia... Aunque sé que ya es para nada.

¿Qué te hemos hecho, María?...

En este día del Dulce Nombre, yo te felicito, María, pero también te pregunto: ¿Qué te hemos hecho, María? ¿Dónde quedó tu hermosísima sonrisa, sólo capaz de competir con la belleza de tus fascinantes y profundos ojos?

Acepto mis culpas, mis errores, mis fallos, las veces que te he decepcionado, las veces que te he dejado atrás, que me he equivocado. Incluso te pedí perdón por escrito de todos mis fallos y errores. Para mí es una inmensa tristeza, una inmensa amargura, una grandísima pena que ya ni tan siquiera te pueda saludar, pero así es la vida, lo comprendo.

¿Qué te hemos hecho, María? Porque sé que no he sido solo yo, porque sé que yo no he sido el que más daño te ha hecho (en realidad, no te he hecho daño ninguno, o poco, o muy poco, pero sé que siempre se pueden malinterpretar mis acciones; malinterpretar las acciones, aunque sean tonterías, es muy fácil hoy en día), pero sí comprendo que, si me desprecias y me ignoras en el presente, algo malo he significado para ti.

Sin embargo, por mis sentimientos, por mis recuerdos, por mis emociones y hasta esa extraña sensación que del todo, nunca me ha dejado, yo te sigo deseando todo lo mejor para ti. Que ojalá en este día de tu santo, puedas tener muchos pequeños grandes momentos de felicidad, por el hermoso regalo que te hicieron tus padres al elegirte ese nombre que tienes.

Últimamente, he escuchado varias veces (en televisión, por supuesto), aquello de que "te amo desde la primera vez que te vi". Yo, en verdad, sé que no fue así, pero sí recuerdo aquella primera vez que me fijé en ti, sí recuerdo verte todo de negro, allí, sin integrarte con los demás, sólo mirando y viendo lo que hacían los demás. Sí recuerdo estar a tu derecha, por detrás de ti, preguntándome qué le pasaba a aquella chiquilla. En aquellos momentos y en tiempos siguientes, no se me pasaba por la cabeza que estaba ante la mujer de mi vida, ante la única persona verdaderamente fascinante que he conocido en mi vida, ante mi gran amor; fue a medida de que te fui conociendo, mientras más te trataba, más me enamoraba de ti.

Y ahora, pues eso, no soy nada para ti, como tampoco soy nada para el resto de la humanidad. Muchas gracias por haber sido, tú y sólo tú, alguien tan diferente, tan distinta, tan única y tan especial en mi vida, tan fascinante. Muchas gracias, María, muchas felicidades en tu día. Que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María, bendita seas siempre.

El morado purpúreo, el que decías que era tu color favorito, para lo bueno de este texto; el negro, el color del luto, de la tristeza y la amargura, para lo malo.

 

lunes, 11 de septiembre de 2023

Ya me quedaré sin saber...


Ya me quedaré sin saber por qué te agarraste a mi cintura aquel 19 de junio de 2008, ya me quedaré sin saber por qué fuiste a darme un beso en la mejilla aquel 5 de abril de 2019, ya me quedaré sin saber por qué me escribiste aquel correo electrónico de 15 de enero de 2021... Ya me quedaré sin saber por qué únicamente he visto tus ojos en mi vida; ya me quedaré sin saber por qué la única sonrisa que me gusta ver es la tuya.

Aunque en este día sea tu santo, María Tengoku, desde hace unas semanas, me ronda la pregunta: ¿Qué te hemos hecho, María? O cómo es que te hemos hecho tantísimo daño y me incluyo, sí, porque soy consciente de mis muchos fallos y errores contigo. No sé cuánto daño te he hecho, en verdad que no lo sé. Hasta este 2023, tú eras la única con motivos para odiarme y no lo hiciste; ahora, no sé si me odias, pero sí tengo claro que me desprecias, me ignoras, me haces el vacío total... Y verdaderamente, no sé muy bien por qué.

¿Qué te hemos hecho, María Tengoku? Ojalá que, a pesar de todo, tengas muy feliz día de tu santo, que lo pases muy bien y sea un día muy fructífero para ti. Que Dios guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre.

domingo, 10 de septiembre de 2023

Que tengas una magnífica semana nueva


Que tengas una magnífica nueva semana, María Tengoku. Ya te escribí al final del mes pasado, que no te daría la lata este martes y como por aquí no te voy a dar la lata, pues ese único dato personal que empleo verdaderamente sobre ti, tu nombre, ayude a que tu semana sea muy buena, muy positiva, muy especial, muy agradable, muy cordial, muy afable, muy espléndida para ti.

De momento, ni siquiera sé si algún día volveré a verte; este domingo no he pisado tu pueblo, pienso que aún es pronto. Espero, confío y deseo que estés bien, que te vaya muy bien. Que Dios os bendiga, guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre.

sábado, 9 de septiembre de 2023

Necesito desearte...

Necesito desearte que tengas muy feliz noche de sábado, María Tengoku, que allí donde te encuentres, te estés sintiendo muy bien (feliz, a ser posible), que te encuentres muy a gusto con quien estés (que te sientas especial, a ser posible), y que estés gozando de la vida en la circunstancia en la que te encuentres. Y si hay alguien para quien seas especial y que se sienta especial contigo, infinitamente mejor.

Te lo escribo con mi corazón, María Tengoku, que te vaya muy bien, que te sientas muy bien, que estés muy feliz a gusto, que pases una magnífica noche y que tengas un espectacular domingo. Mis mejores deseos contigo, siempre.

Ya no espero sorpresas por tu parte...

El jueves te marqué algo que es importante para ti, que compartiste hace tiempo y que nadie más te remarcó. He estado esperando muchos días, hasta que tuviera más entradas, hasta que hubiera algunos mensajes más de por medio. Tú sueles remarcar lo que te gusta, cuando alguien más te lo indica; ya han pasado dos días y tú no lo has remarcado, claramente, porque he sido yo quien lo ha marcado primero. No quieres nada de mí, no quieres nada conmigo. Sé que he cometido muchos fallos, sé que he cometido muchos errores, pero siempre te he tratado de aportar lo mejor de mí, pero se ve que soy tan poquita cosa que, todo lo que soy, no sirve de nada. Esa es mi vida, mi vida es así.

Ya no espero sorpresas por tu parte, como si las había cuando me respondías, cuando me demostrabas que estabas al otro lado de la pantalla. Ya sé que por tu parte, para mí, no hay nada. Para mi desgracia, no es igual de mí para ti.

En fin, ojalá que te vaya a ti muy bien, María Tengoku, que seas muy feliz, que puedas disfrutar mucho del fin de semana y de la vida. Que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre.

viernes, 8 de septiembre de 2023

Te deseo para ti todo lo que yo no tengo


Te deseo para ti todo lo que yo no tengo, María Tengoku: Que haya alguien en tu vida con quien compartir pequeños grandes momentos en los que sentiros especiales esa persona y tú; que te sientas muy bien con esa persona y esa persona contigo; que os acompañéis, que os ayudéis, que os améis, que disfrutéis mucho de estar ambas personas juntas. Te deseo que te sientas muy feliz, María Tengoku.

Si este deseo que expreso no ha empezado ya, que empiece esta noche de viernes o lo haga pronto, para que disfrutéis mucho, para que os sintáis muy felices, para que os alegréis mucho mutuamente. Para que disfrutes mucho, para que te sientas muy feliz, para que te alegres mucho, María Tengoku, bendita seas siempre, feliz fin de semana tengas, te deseo para tu todo lo que yo no tengo, no he tenido (salvo la fascinante excepción que ha habido en mi vida, aunque tú sólo te encapricharas conmigo, aunque no pasara nada realmente entre nosotros), ni tendré.

domingo, 3 de septiembre de 2023

Deseo para ti lo que yo no tengo...


Hoy lo he pensado varias veces y necesito escribirlo: Deseo para ti lo que no he tenido, lo que no tengo y lo que no tendré, es decir, una persona con la que compartas la vida, que te haga sentir especial y tú hagas sentir especial a esa persona, que podáis compartir muchos pequeños grandes momentos en los que sentiros felices.

Yo, a mi edad, con mis circunstancias y mi forma de ser y de sentir, lo tengo ya imposible, pero tú aún eres joven, aún tienes tiempo por delante. Ahora, en este tiempo presente, estás más impresionante que nunca y tengo claro que, si no estás con alguien (insisto, si no estás con alguien, porque realmente, no lo sé), es porque es decisión tuya. Pero, como ya has hecho en el pasado, espero que cambies de opinión y, si aún no existe esa persona en tu vida, te llegue pronto, para que puedas disfrutar mucho y bien de todo. Ya sé que esa persona no seré yo, pero no por eso te voy a seguir deseando todo lo mejor para ti.

Si de aquí al final de mes no ocurre nada, será algo parecido a esto lo que te escriba en mi correo mensual, precisamente porque quiero desearte lo mejor. Que Dios os guarde y cuide a todos los tuyos y a ti, María Tengoku, bendita seas siempre y que tengas una estupenda nueva semana.

sábado, 2 de septiembre de 2023

Tras este parón, magnífica noche de sábado para ti...

He estado guardando unos días de luto, por dos muertes importantes en mi entorno. No puedo meterme presión a mí mismo, porque entonces sí que me volvería loco de verdad.

Ya esta noche sí puedo escribirte con tranquilidad que espero que pases una magnífica noche de sábado, María Tengoku. No me importa que, aunque te escribiera el jueves para desearte un magnífico mes de septiembre, tú no me respondas a nada, porque mi amor por ti fue, es y será incondicional. Porque tú lo vales, porque tú mereces mi pena, porque tú mereces mi amargura, porque tú eres infinita, porque tú eres todo un hermoso universo en ti misma.

Que tengas muy feliz día del Señor; aunque está haciendo fresco en estos días, doy por sentado que sigues en tu lugar estival; ya intentaré verte el domingo que viene. Feliz día del Señor para todos los tuyos y para ti.

Dios te bendiga

A pesar de mi confianza en Dios, a pesar de mis oraciones, de mis esfuerzos, no pudo ser. Allí estabas tú. Y ya estaba avisado de que estuvi...